las
mentiras no son sólo verdades
disfrazadas de excusas
los trajes de peros
cosidos con frágiles hilos dorados
comienzan
a deshacerse como ropa vieja
quedaré
y quedarás
desnudo de esta piel
expuestos al aire
y nuestras
efervescentes miradas
permanecerán
unos instantes
-nada más que unos-
latiendo con la intensidad
de un abrazo sincero
luego desaparecerán
junto a los rojos cuerpos
en busca de nueva piel
para armar otros sueños
y volver a empezar
volver a morir
a nacer de nuevo
una y otra vez